Con dolorosa precisión
voy debridando uno a uno tus bordes,
tus adherencias a cada cuerda
de mi tendinoso corazón.
Recorto tu imagen de mi pensamiento,
quito con pinzas cada hilo de tu voz,
cada huella de recuerdo del pulpejo de tus dedos.
Seco tu saliva
deodorizo tu olor
lavo tu mirada quitando los restos de retina
detrás de mis pupilas,
silencio el eco de tu respiración.
Esterilizo tus besos
retiro de la tela tus óleos
te hago exéresis
previa asepsia y antisepsia;
y no queda nada de ti,
ni el mas mínimo vestigio o evidencia
como si nunca hubieses existido.
Exhalo…
Lavo mis manos
Apago la luz.
Emilia Lee/ La mujer de abril
vuelosdedragon.blogspot.com
tus adherencias a cada cuerda
de mi tendinoso corazón.
Recorto tu imagen de mi pensamiento,
quito con pinzas cada hilo de tu voz,
cada huella de recuerdo del pulpejo de tus dedos.
Seco tu saliva
deodorizo tu olor
lavo tu mirada quitando los restos de retina
detrás de mis pupilas,
silencio el eco de tu respiración.
Esterilizo tus besos
retiro de la tela tus óleos
te hago exéresis
previa asepsia y antisepsia;
y no queda nada de ti,
ni el mas mínimo vestigio o evidencia
como si nunca hubieses existido.
Exhalo…
Lavo mis manos
Apago la luz.
Emilia Lee/ La mujer de abril
vuelosdedragon.blogspot.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu visita. Tu comentario será susceptible de moderación para su publicación.
Emilia Lee